La cultura del pueblo Vasco
- Jon Imanol Pereira
- 30 abr 2020
- 2 Min. de lectura
El pueblo vasco ha mantenido durante siglos su herencia cultural y mitología. El culto a Mari, la diosa madre, se mezcló con las creencias paganas, formando un sincretismo de lo más interesante que se mantiene en el territorio. Se dice que Mari habita en los montes del País Vasco, siendo el monte Amboto el más característico, cerca del Santuario de Urkiola.
Otra seña de identidad de los vascos es el matriarcado, que daba a las mujeres de la casa un papel preponderante en la administración de los bienes familiares, desconocido en el resto de España. Era habitual, por ejemplo, que se pactase la emigración del marido para juntar capital mientras que la esposa se encargaba del mantenimiento de la hacienda familiar.
Relacionada con el matriarcado, no podemos obviar la existencia de los txokos y sociedades gastronómicas. En estos locales, gestionados conjuntamente por los miembros de una cuadrilla, se celebran periódicamente comidas. A diferencia de los restaurantes tradicionales, a estos locales solo se accede por invitación, dado que en los viejos tiempos era la principal vía de esparcimiento de los padres de familia.
El elemento más representativo es su lengua, el euskera. La supervivencia de esta —considerada la lengua más antigua del continente europeo— hasta la actualidad sólo confirma lo arraigado que está en el pueblo vasco. Ha servido como vehículo de las costumbres, tradiciones, mitos y leyendas del País Vasco. Es un elemento claramente diferenciador, ya que esta lengua no se parece en nada a ninguna otra del mundo. Ellos distinguen entre los “euskaldunak” (los que poseen el idioma vasco) y los “erdeldunak” (que tienen idioma no vasco).
En todas las fiestas vascas, siempre saldrán a relucir sus danzas. Está, por ejemplo, el Aurresku, un baile solemne y elegante en donde la mujer no baila sino que es bailada. Los hombres entran a la plaza e invitan de a las mujeres más importantes del pueblo a ingresar a sus rondas de baile, para terminar con un desafío entre los bailarines más habilidosos. La Mutildantza del Baztan, que es otro baile exclusivamente de hombres. La Mascarada suletina, así llamada por su aspecto algo carnavalesco y la Ezpatadantza, simboliza el homenaje al soldado muerto en defensa de su patria.
Asi de esta manera podríamos añadir un largo etc a las tradiciones del País Vasco, fiestas, gastronomía pero sobre todo cuando hablamos de su mitología ( a mi parecer muy interesante ) así es que los añadiré en entradas posteriores.

Me encantan este tipo de historias y cosas de nuestra tierra. Veo que aparte de la calidad de los ingredientes y de la calidad humana de los camareros, también se comparte cultura. Un aplauso